Crear un ambiente de trabajo seguro, consciente de la salud y eficiente es crucial para cualquier empresa. Esto incluye garantizar que áreas como las oficinas reciban una iluminación adecuada. Aunque a menudo se pasa por alto, la iluminación es un aspecto crítico del diseño del lugar de trabajo, regido por regulaciones estatales y federales que describen los requisitos de iluminación adecuados para los entornos de oficina.
Entendiendo los Estándares de Iluminación de Oficinas
A nivel nacional, la Administración de Seguridad y Salud Ocupacional (OSHA) establece estándares de iluminación para espacios de oficina, complementados por directrices específicas de cada estado. Estos estándares generalmente hacen referencia a las recomendaciones del Instituto Nacional Americano de Estándares (ANSI), en particular a la Práctica de Estándar Nacional Americano para Iluminación de Oficinas, y a las directrices de la Sociedad de Ingeniería de Iluminación de América del Norte (IESNA).
Los estándares de iluminación de oficinas proporcionan pautas de nivel de iluminación, medidas en lux, que difieren según la naturaleza del trabajo y su dependencia de las computadoras, entre otros factores.
El objetivo de estas normas es fomentar un entorno laboral que sea propicio para la comodidad de los empleados, permitiéndoles realizar sus tareas de manera efectiva y productiva, libres de problemas como fatiga visual.

Aparte de los niveles de iluminación, lo más relevante de estas directrices se centra en asegurar que las fuentes de luz estén bien mantenidas y estén posicionadas de tal manera que minimicen problemas como el deslumbramiento y las sombras excesivas.
Entendiendo las Métricas de Iluminación
Existen varias métricas de iluminación diferentes que se pueden utilizar para medir la calidad y cantidad de luz, y todas ellas son relevantes para asegurar que una oficina esté iluminada correctamente. Las tres más relevantes son el flujo luminoso, la temperatura de color y el índice de reproducción cromática.
Flujo Luminoso y Lux
El flujo luminoso mide la potencia visible de la luz, siendo esencialmente la cantidad de iluminación que proporciona. Esto se mide típicamente en lúmenes o lux (lx), siendo el lumen la cantidad total de luz emitida por una bombilla y el lux midiendo los lúmenes por metro cuadrado. El lux generalmente tiene mucha más relevancia al determinar estándares, ya que se puede utilizar para asegurar que un área específica esté adecuadamente iluminada.
El lux recomendado para un espacio de trabajo varía según la naturaleza del trabajo, siendo las tareas que son inherentemente de bajo contraste o de un tamaño muy pequeño las que requieren niveles de iluminación más altos que las tareas más grandes y de bajo contraste.
La Práctica de Estándar Nacional Americano para Iluminación de Oficinas recomienda que en oficinas donde el trabajo es predominantemente basado en computadoras, los niveles de iluminación no deben exceder 500 lux para evitar un contraste excesivo en la pantalla, lo cual está en línea con la recomendación de la Sociedad de Ingeniería de Iluminación de América del Norte de 200 a 500 lux para tareas de alto contraste y a gran escala.
Si se están realizando otras tareas que requieren niveles más altos de iluminación, se debe utilizar iluminación de tarea para lograrlo.
Temperatura de Color – Más crítica de lo que piensas

El color de la luz visible se describe mediante la temperatura de color, utilizando unidades de kelvins (K). Las temperaturas de color más bajas indican colores más cálidos con un matiz amarillo o rojizo, mientras que las temperaturas más altas sugieren una iluminación más fría con un tinte azulado, como se observa en el gráfico anterior.
Típicamente, recomendamos una temperatura de color de gama media para oficinas, entre 4000 y 5000 Kelvin. Vale la pena señalar que la temperatura de color de la luz no tiene correlación con el calor real generado por la bombilla o el accesorio.
Los estándares de iluminación establecen que la temperatura de color de la iluminación es importante, y los estudios han demostrado que tiene un impacto sustancial en la alerta y los niveles de energía. También es importante entender el impacto que la temperatura de color de la iluminación puede tener en el estado de ánimo, siendo la iluminación de calidad más cálida la que promueve la relajación, mientras que las temperaturas más frías mejoran la concentración.
Salas de Conferencias y Espacios de Reunión
Las salas de conferencias y los espacios de reunión a menudo tienen menos enfoque en las pantallas que el entorno de oficina general, lo que significa que generalmente no hay necesidad de mantener el nivel de iluminación bajo por preocupaciones sobre el contraste de la pantalla. Si los asistentes probablemente van a tomar notas o leer de documentos, esta es una actividad de menor contraste y, como tal, justificaría una iluminación de mayor lux.
No hay una regla estricta para la temperatura de color de la iluminación en tales circunstancias, pero se debe considerar que complemente el ambiente de la reunión. Si su sala de conferencias es multifuncional, sugeriría obtener luminarias regulables en una temperatura de color neutra (4000-5000 kelvins).
Índice de Renderización de Color – ¿Por qué es importante?

La reproducción del color es la forma en que una fuente de iluminación impacta el color percibido de otros objetos. El índice de reproducción cromática (CRI) es una medida de cuán cerca está la reproducción del color proporcionada por una luz específica de la luz natural.
En general, la iluminación debe tener un CRI mínimo de 80 para permitir un nivel razonable de comodidad, pero se recomienda un CRI más alto de al menos 90 si las tareas son críticas en cuanto al color.
¡Haz clic para comprar la lámpara Honeywell ahora!